Mucho se habla de que unos cuantos ricos poseen el dinero que millones de personas no tienen, sin embargo, casi nunca se menciona que aquellos que tienen en sus manos empresas grandes son los que más posibilidades tienen de salvar situaciones en las que ni los gobiernos pueden operar.
Haití es un país sumamente pobre, cuyo gobierno se ha perdido entre conflictos, corrupción y la entrada intervención de otras naciones. Sin embargo, hoy por hoy está luchando por salir adelante, avanzar y alcanzar la estabilidad económica.
Reuven Bigio pertenece a la familia más rica de Haití, cuyo capital es el que representa al país en otras naciones. GB Group es el conjunto de negocios y empresas que además tienen su origen en el siglo XXI, cuando migraron de Italia a este territorio.
Gilbert Bigio, padre de Reuven, cambió el sentido del negocio familiar y en 1972 lo redirigió hacia crear proyectos que también beneficiaran a la población haitiana. Esto mismo lo sigue hoy haciendo su hijo, quien es conocido por sus actividades filantrópicas.
En 2010 un fuerte sismo sacudió a la isla y la devastación fue tan grande que miles de personas quedaron en la miseria, colapsaron los servicios públicos y aumentó la violencia debido a que el gobierno quedó completamente inoperante ante el desastre.
En ese momento Reuven se puso en contacto con la embajada de Israel en Dominicana y acordó la construcción de un hospital temporal, como una manera de paliar los efectos del desastre y atender a todas las personas que habían sido afectadas. Sin duda alguna en ese momento fueron muy útiles las relaciones de la familia Bigio a nivel internacional y las posibilidades que Reuven tenía como empresario reconocido, además de pertenecer a la comunidad judía de Haití.
Actualmente Reuven es CEO de GB Group, pero además de su mano van todas las acciones de beneficio social que realiza la compañía, adicional al trabajo que ya hace atrayendo inversión y generando empleos en la isla.
También en 2015 y gracias a Reuven a cargo de GB Group, se inauguró Port Lafito, el primer puerto Panamax de Haití y equipado con toda la tecnología necesaria para que la isla pudiera volverse un sitio importante para exportaciones en América Latina y el Caribe.
Más adelante también se registró la compra de Chevron, lo que abrió la puerta a nuevas inversiones relacionadas con combustibles. Reuven Bigio es bien conocido en Haití y Dominicana debido a sus acciones altruistas, mismas que sólo siguen la línea de lo que su padre le enseñó y que van enfocadas a convertir a la isla en una gran nación.
